Descubre cómo puedes ahorrar un 40% en tu aire acondicionado este verano
El consumo del aire acondicionado puede llegar a ser una parte importante de la factura de la luz. Es un aparato que podemos utilizar bastantes horas, especialmente en los meses de verano, y necesita consumir muchos recursos para funcionar. Sin embargo, algo que debes saber es que no todos consumen lo mismo. De hecho, la diferencia entre uno y otro puede ser más que importante.
Damos mucha importancia al modelo de aire acondicionado que utilicemos para poder consumir menos y reducir el consumo en la factura. Tal vez te interese realizar un cambio, pensando especialmente en los meses en los que lo vas a utilizar más. Aunque sea una inversión, a la larga puedes ahorrar dinero.
Aire acondicionado eficiente
Podemos ahorrar hasta un 40% en la factura de la luz al usar el aire acondicionado si utilizamos un modelo de eficiencia energética A. ¿Qué significa esto? Son los que han sido calificados de menor consumo, más optimizados y preparados para funcionar sin necesidad de hacer un gran uso de recursos.
Si tienes un modelo antiguo, de hace ya bastantes años, la diferencia respecto a uno más actual puede ser muy grande. Es algo que podemos ver en el caso de un frigorífico, un horno, televisión… Prácticamente cualquier aparato, pero lo notamos más en aquellos que tienen un mayor consumo y el aire acondicionado es un ejemplo claro.
Pero incluso dentro de los modelos más actuales, pueden tener diferente calificación en cuanto a eficiencia energética. Están divididos de A a G, siendo A el más eficiente y G el menos. Si tienes uno de tipo B o C, mejor que uno que sea E o F. Para llegar a ahorrar hasta un 40%, hacemos hincapié en la importancia de que sea de eficiencia energética de tipo A.
Estos modelos son los que gastan menos. En algunos casos, si tienes un modelo que consuma bastante más, comprar uno nuevo puede salir rentable. Lógicamente esto dependerá de varios factores, como el tiempo que utilices el aire acondicionado, si tu modelo es muy antiguo o no tanto, el precio, etc.
Controlar la temperatura, algo fundamental
Independientemente del aire acondicionado que utilices, del modelo exacto que tengas, algo muy importante es controlar la temperatura. Marcar correctamente a qué temperatura queremos que funcione el aparato, es imprescindible de cara a ahorrar en la factura de la luz. Cada grado cuenta.
Se calcula que cada grado puede suponer un aumento del 7% del consumo. No es algo exacto, pero sí podemos hacernos una idea. No necesitas tener la casa fría, a 18 o 19 grados. De hecho, incluso puedes evitar tenerlo a 22. De cara a ahorrar, con ponerlo a 24 grados es suficiente para estar cómodo y no necesitar más.
Mientras mayor sea la temperatura, menor será el consumo. Si puedes ponerlo a 25 o 26, mejor que tenerlo a 22 o 23. Ya dependerá de tu situación, de dónde vivas, la temperatura exterior, etc. Sea como sea, controlar bien la temperatura del aire acondicionado va a ser clave para ahorrar. Si usas la domótica, puedes tener un mayor control. Eso sí, es importante tener buena cobertura y a veces tendrás que usar repetidores Wi-Fi para tener más señal.
Fuente:
Redeszone
Elaboración propia